Asumiendo dificultades.

Para mantenernos sanos y saludables, no recurramos al hechizo, ¡Por favor!

Cuando se trata de problemas que nos parece que no les encontraremos solución, lo que habremos de hacer es levantar la cabeza y encararlos.

Nos diremos entonces “Yo seré superior a mi problema, no podrá vencerme, y además es seguro por cierto, que esto como tantas otras cosas irá quedando atrás”. Es mucho más fácil perdonar a los demás que perdonarnos a nosotros mismos.

La auto recriminación no es un remedio para nuestros males. No nos ayuda para nada a salir adelante.

Yo diría, sugiero, porque no aconsejo, que debemos decirnos al contrario de lo anterior:”Bueno, ya esta hecho, ya pasó, no puedo ni pretendo hacer nada para cambiar el pasado. Me consuela pensar que la conclusión que debo sacar, es que este error me servirá de experiencia, y por lo tanto, lo voy a olvidar”.

Convenzámonos que es tiempo inútilmente perdido el tratar de reformar o rehacer el pasado, para curar heridas. Razonando serenamente nos daremos cuenta que el llorar por lo pasado no lo va a reintegrar al presente, y si nos gusta llorar lloraremos igual una vida entera sin ningún resultado positivo.

En lo que a mí respeta, muchas veces, pero muchas… me he sentado a razonar y esto me ha ayudado a mantenerme firme y serena, y sana físicamente. Porque cuando nuestras emociones llegan hasta el límite, sin ninguna duda, nuestra salud se resiente.

Por lo tanto, es tonto, es inútil, y no aporta nada bueno, el dejarnos arrastrar por la angustia que lógicamente nos invade, ante los sucesos ingratos de la vida. En todo caso, generalmente no vamos a poder evitar o controlar lo que nos suceda, pero si podremos dominar nuestras emociones. Los problemas que puedan surgir, están mas allá del control humano.

Pues bien, yo personalmente creo en la fe ciegamente. Porque he sufrido momentos muy difíciles en mi vida. Y además creo que quien mas quien menos los ha sufrido.Y en esos momentos, la fe ha sido para mí una salida. Pero también creo en lo eficaz que es la voluntad para superar una pena o un dolor.

Además el tiempo es una excelente ayuda. Pero debemos a la vez, nosotros ayudar al tiempo y aprovecharlo con inteligencia para encontrar más pronto una buena respuesta.

Pienso amigas y amigos que talvez nunca podamos alcanzar la plenitud de la vida, llegar a la mayoría del logro de nuestros sueños, sin antes haber vivido, dolores, desesperanzas y amarguras y haber luchado para superarlas.