Si después de haber pasado los 60 seguimos comiendo la misma cantidad de alimentos con calorías que comíamos a los 30, seguramente vamos a subir de peso ya que con los años nos van disminuyendo los requerimientos calóricos en nuestro cuerpo. Y más aun, si sumamos una dieta sin ningún tipo de prolijidad (grasas, azúcar, harinas en exceso), también seguramente vamos a seguir inclinado la balanza para el lado que menos nos gusta, y que en realidad tampoco para nada nos conviene.
No nos conviene porque relacionados con el sobrepeso están el colesterol, la diabetes, la hipertensión y otros problemas inherentes. Por lo tanto, como primera medida debemos comenzar por controlar las calorías. No deberían sobrepasar nunca de las 2.000.
Para esto debemos reducir las grasas, aumentar las fibras, los minerales y las vitaminas La ingesta de calcio con lácteos debe aumentarse. Las fibras insolubles aumentan la eliminación de toxinas y son mejores si provienen de frutas, verduras y cereales.
Las fibras en cualquier caso deberán ser incorporadas gradualmente, porque pueden llegar a ocasionar inflamaciones intestinales.Es bueno en cuanto a fibras solubles se refiere, el salvado de avena, y frutas y verduras porque ayudan a reducir el colesterol.
Con cereales integrales, hortalizas de colores intensos, verduras de hoja y un complemento variado de frutas se logra obtener una gran dosis de vitaminas y sales minerales. En ellas están contenidos el betacaroteno, vitamina C, vitamina E y selenio.
Pero el caso es que después de pasados los 60, las mujeres principalmente debemos tener prioridades entre todos ellos. Y una de las más importantes es el calcio, que combate y evita la osteoporosis.
Para eso se debe tratar de consumir un alto porcentaje de productos lácteos, que por otra parte ciertas personas tienen problemas para digerirlos. Damos entonces algunas ideas para facilitar la absorción de los citados alimentos.
Incorporar leche en polvo descremada a salsas y postres que sean de bajas calorías, agregar a la dieta yogur descremado que es digerible y protege los intestinos, mejorando la alimentación con vitaminas del grupo B.
Estas, y una muy variada indicación de alimentos sanos y sin grasa o con poca grasa son sugerencias que ofrecemos hoy, y seguiremos ofreciendo en nuestros posts, siempre inclinados a favorecer el mantenimiento de la salud y el bienestar en los años dorados de la tercera edad.
Es bueno tener en cuenta estas cosas sencillas pero positivas, reemplazando así las recetas fuertes de cada día por sencillas recetas que nos ayudarán a mantener el nivel del calcio en el organismo, sin aumentar la grasa
Prometo también que empezaré a publicar una serie de recetas light, que iré agregando poco a poco, junto con los consejitos para lograr mantenernos optimistas y renovados en esta etapa.
Prontito vuelvo.
¡A vivir y disfrutar este otoño maravilloso que tenemos de regalo por la Madre Naturaleza!
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