El silencio. Una cura natural.

Si nos ponemos a pensar nos damos cuenta que la mayor parte de nuestros días estamos rodeados y acosados por ruidos, que a pesar de estar acostumbrados, a la larga terminan por molestarnos.Se ha comprobado por medio de especialistas en la materia, que el silencio, (un rato de silencio) es uno de los mejores medios para hacer desaparecer la tensión, y lograr ordenar los pensamientos.Es que nuestra mente no está preparada para soportar un continuo sonido de todos los tipos y medidas. Por esa causa muchas veces sentimos que nuestra cabeza es como un canasto lleno de papeles con diferentes informaciones, donde no logramos encontrar uno que se nos ha perdido, o no podemos recordar donde fue guardado.Es así que en estos casos necesitamos sí o sí, disponer de un lapso de silencio. Es un método natural y seguro que nos hará volver sin ninguna duda a sentirnos bien.Bastará para esto si uno está en la casa, apagar la radio, la televisión, o alejarse por unos minutos de la computadora. No es necesario encerrarse ni taparse los ojos y los oídos. Solo quedarse en silencio durante 10 o 15 minutos hasta encontrar que nuestra cabeza se aclara y volvemos a la normalidad. En ese tiempo, y para alejar pensamientos que puedan enturbiar el momento será bueno hacer un repaso general de las cosas buenas que hemos vivido, los paisajes hermosos que hemos conocido, o aun sin conocerlos, imaginarlos, tranquilos apacibles y con suaves colores, recreando esas imágenes.Es imposible pretender que esos minutos de silencio y tranquilidad nos puedan resolver problemas o conflictos, pero si podemos creer que nos ayudarán a mantener o conseguir claridad mental, para poder buscar y encontrar soluciones para los mismos. O de lo contrario, para poder enfrentarlos con la mente serena y preparada.