Un importante médico, especializado en enfermedades cardiovasculares, descubrió, y de esto hace casi 20 años, que corren menos riesgo de sufrir una enfermedad de las arterias coronarias quienes consumen nueces cinco veces a la semana por lo menos. Una pequeña porción es suficiente, porque las nueces son una poderosa fuente de grasas benéficas monoinsaturadas y poliinsaturadas, como también portadoras de vitamina E.
Según este médico, también contienen magnesio, que ayuda a evitar la arritmia cardíaca.
Este descubrimiento entonces tiene la facultad de conocer los poderes de algunos alimentos de consumo diario, que ayudan a prevenir enfermedades y prolongar la vida.
Los habitantes de los países cercanos al mar mediterráneo están reconocidos como longevos por gozar de una salud que no es común en otros lugares del mundo.
Se ha comprobado que esto se debe a su dieta saludable basada en la ingesta de frutas frescas y granos enteros.
Otro médico dice que el consumo de no más de dos copas diarias de vino, disminuye la incidencia de enfermedades coronarias. Esto es debido a que la uva produce una sustancia que se llama resveratrol, e investigaciones llevadas a cabo demuestran que dicha sustancia reduce la concentración de grasa y colesterol en la sangre.
También el consumo de ajo periódicamente tiene la virtud de retardar la coagulación de la sangre, lo que ayuda a disminuír el riesgo de que se formen coágulos y aparezcan enfermedades cardíacas.
En otro órden también se ha comprobado que los cítricos son una muy apreciable fuente de vitamina C, y contienen a la vez una impresionante reserva de sustancias que son beneficiosas para la salud.
Por último los científicos recomiendan en cada comida hacer una combinación de alimentos, que nos provean de los nutrientes y agentes protectores que necesita cada organismo.
Por lo tanto, no solo al paladar debemos darle el gusto cuando los escogemos, sino que debemos concientizarnos de lo que es bueno o malo.
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